Las curiosas monedas de oro de fantasía de Shanghai

Fuera del ámbito de la numismática tradicional china hay una serie de denominaciones inusuales de 50 y 25 tael en oro, que se han visto durante el siglo pasado como fantasías en lugar de ediciones oficiales de casas de moneda.

Dos de estas fantasías extremadamente interesantes y raras denominadas 25 taels fueron subastadas entre el 4 y el 6 de mayo por casi US$35.000 en el décimo aniversario de Stack's Bowers en Hong Kong. Estos ejemplares ofrecen una visión del bullicioso y emergente clima de negocios que era Shanghai (上海) en la década de 1920.

Estas curiosas piezas representan leyendas que indican que fueron acuñadas durante el reinado del emperador Tóngzhì (1861-1875), aunque su fabricación apunta claramente a una fecha posterior, probablemente después del establecimiento de la República, cerca del final del primer cuarto del siglo XX. Como tal, es casi seguro que se emitieron en privado para su uso como monedas de pseudocomercio de mayor valor entre los empresarios de Shanghai. Esta fecha revisada proviene de un indicio proporcionado por un tael de 50 años que tiene una fecha cíclica correspondiente a 1869 junto con una indicación de un "50 aniversario", que apunta a una fecha sorprendente de 1919.

Los anversos de estos tipos de oro metálico emplean dos dragones imperiales, dispuestos verticalmente, con una perla ardiente arriba. Se utiliza una mezcla de leyendas inglesas y chinas, con el inglés refiriéndose al "Imperio de China" y "25 tael", mientras que las leyendas chinas se traducen al reinado antes mencionado del Emperador Tóngzhì, así como a un valor de "20 y 5 liang (tael) en oro". Esta certificada por la NGC como MS-63.

Los reveses presentan una iconografía aún más interesante, con una deidad budista tántrica de 16 brazos, Mahakala, sentada en un sofá de flores de loto, con varios implementos en sus muchas manos. Alrededor, dos dragones imperiales más agregan un elemento al borde, con una perla ardiente nuevamente fuera de su alcance en la parte superior. El uso de esta deidad es peculiar, aunque se lo ve en las entradas de muchos monasterios budistas como una figura protectora.